Lograr el embarazo de forma natural es un objetivo que muchas familias persiguen en su afán por alcanzar su sueño. Si algo nos enseñan diariamente los tratamientos de reproducción asistida es que el azar no es más que un pequeño factor en una larguísima ecuación que suma muchísimos elementos diferentes. Por eso, antes que dejarlo todo en manos de la suerte, debemos pensar en la ciencia. Incluso para seguir el método clásico podemos aplicarla: debemos centrar nuestros esfuerzos en los días fértiles.
En primer lugar, si buscamos el embarazo de forma natural, debemos mentalizarnos de que puede llegar en cualquier momento. Quizá ocurra en la primera semana, es posible incluso que suceda sin darnos cuenta, o que tarde más de lo inicialmente previsto. En cualquier caso, conviene tener siempre en mente los ciclos menstruales, pues serán los que marquen dónde podemos hallar los días más fértiles.
Los días fértiles no son sino esa breve fase del ciclo menstrual en la que las relaciones sexuales tienen más probabilidades de culminar en embarazo. Estos días son aquellos en los que el óvulo ha madurado y se libera del ovario: una fase de ovulación que -aunque puede variar- dura entre tres y cinco días, según la capacidad de supervivencia del óvulo y la capacidad de fecundación de los espermatozoides.
Para conocer los días fértiles, primero debemos saber cómo funciona y se divide el ciclo menstrual. Un ciclo menstrual es el tiempo que transcurre entre una menstruación y otra. En esa fase, de aproximadamente cuatro semanas -aunque es frecuente que pueda acortarse o alargarse-, el cuerpo experimenta unos cambios hormonales que preparan el cuerpo para el embarazo.
El ciclo está dividido en dos fases. La primera parte, fase folicular, da comienzo el primero día de la menstruación y termina con la ovulación. La segunda, conocida como la fase lútea, alcanza desde ese mismo momento hasta el día previo a la siguiente menstruación. Aunque el ciclo menstrual tenga una duración irregular, ese ecuador marca el punto de inflexión para quienes buscan los días fértiles.
La segunda fase del ciclo, que es cuando se producen los días fértiles, tiene una duración aproximada de entre 12 y 16 días. Eso implica que puede calcularse, aproximadamente, cuándo sucederá: basta con calcular el día en el que tendrá lugar la próxima menstruación y restarle esa horquilla para saber entre qué fechas habrá más probabilidades de conseguir el embarazo mediante el coito.
Además, aunque tampoco suponen un método científico, en la red pueden encontrarse calculadoras de días fértiles que, a partir de ciertos datos, nos muestran una horquilla. Se introducen cifras como la duración media del ciclo menstrual o la fecha de la última regla y se obtiene una aproximación de cuándo se acercan los días de mayor fertilidad.
Así como podemos controlar nuestros hábitos diarios, la alimentación o el estilo de vida para tener más probabilidades de alcanzar un embarazo, para conseguirlo de forma natural los días fértiles son uno de los referentes a seguir. Todo sea para contar con las máximas posibilidades de lograr el sueño de formar una familia.
Y, si lo que quieres es un empujón para aumentar tus posibilidades al máximo, en UR IMED Valencia te ayudamos y guiamos con un programa y planificación de coitos dirigidos.
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